Nos
han dicho durante tantos años, nos han enseñado, nos han repetido, las hazañas
de aquellos que nos precedieron, batallas ganadas, las que han perdido, las que
han abandonado.
Hemos
leído numerosa veces, de sus padecimientos, de sus bondades, de sus palabras,
de su fe.
Han
querido que pensemos como ellos, que vivamos como ellos, que suframos como
ellos, sin entender que somos, seres distintos, pensantes, equivocados o no,
pensantes.
Hemos
traído hijos al mundo, algunos hemos escrito poemas, otros cantamos las
canciones que importan, hemos amado, hemos perdido, hemos vuelto a amar,
sabedores de cuál es nuestro lugar lo hemos ocupado, sin invadir al otro,
tratando de ser buena gente, de que nos recuerden como personas de bien.
Salimos
a trabajar en condiciones extremas, soles de enero nos han castigado el lomo,
lluvias de inviernos han enfriado nuestras almas, malos tratos de quienes nos
pagan un sueldo, caricias de quienes amamos como: amigos, hermanos, nos han
empujado a seguir haciendo la vida…la nuestra, la de nuestros herederos, la de
la tierra.
Así
es como hacemos patria, caminando, existiendo, aunque nuestros huesos duelan de
soledades, de destierros, de exilios forzados por una u otra circunstancia.
Amando
nuestro suelo, lo hemos abonado con nuestra sangre, con nuestros viejos, con
algunos amigos, con nuestras lágrimas, y algunos de ustedes con algunos hijos
en islas solitarias de allá lejos en el sur.
Así
se hace patria, con nuestros sueños, nuestros hijos, amando la bandera, las
costumbres, nuestra idiosincrasia, respetando a nuestros mayores, sintiéndonos
orgullosos de nuestro sudor, de nuestra fe, de nuestras creencias.
DERECHOS RESERVADOS 2013 NESTOR
R DIAZ
PARA EL MAÑANA DE MI PUEBLO
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